Esta semana se inició el proceso de fortalecimiento de capacidades que permitirá a las instituciones aliadas del proyecto Arte y Diálogo para la Paz implementar sus respectivas mesas de diálogo. Mediante estos espacios, Vichama, Puckllay y Kactus buscarán promover la reflexión y el abordaje de las problemáticas más relevantes para los jóvenes en los distritos de Villa el Salvador, Carabayllo, y San Juan de Lurigancho.
La primera ronda de jornadas de trabajo para la implementación de las mesas de diálogo fue facilitada por Anni Paredes, coordinadora del proyecto, con el apoyo metodológico de Gustavo Moreno, Director de Programas de Formación de ProDiálogo, quien contribuyó en la selección y adecuación del conjunto de premisas conceptuales que constituyen el marco teórico para el desarrollo de plataformas transformativas al interior del proyecto.
“Esta primera ronda buscó generar un intercambio abierto entre los miembros de las organizaciones aliadas en torno al marco teórico”, comenta Anni. “La reflexión conjunta permitió delinear los principios rectores de cada mesa, así como sus objetivos”, añade. Así, todas las mesas se proponen convertirse en espacios de generación de iniciativas que promuevan cambios a nivel local.
Cada jornada tuvo sus particularidades en la aproximación a las premisas conceptuales, pero en todas se coincidió en la necesidad de establecer el valor del diálogo genuino, y diferenciarlo de otro tipo de prácticas. “Para ellos fue fundamental definir qué significa diálogo, y que, no”, comenta Anni. “Esta preocupación manifiesta el valor que le atribuyen al diálogo genuino en la generación de vínculos de confianza y colaboración”, explica. Del mismo modo, en las tres instituciones coincidieron en la necesidad de incorporar nuevos actores, individuales, comunitarios o institucionales, que estén interesados en promover una cultura de paz en sus distritos.
Las problemáticas más destacadas en la primera ronda de jornadas fueron la violencia en diferentes ámbitos, el maltrato a los niños, a los adolescentes y a las mujeres, el embarazo adolescente, la inseguridad ciudadana, la falta de honestidad, el abuso de autoridad, el desperdicio del agua y la contaminación ambiental. Las instituciones aliadas se comprometieron a abordar alguno de estos temas en sus siguientes iniciativas ciudadanas.
Para ProDiálogo y sus instituciones aliadas, esta nueva fase constituye un reto especialmente interesante, pues implica sembrar las semillas de la sostenibilidad del proyecto. Esperamos que este esfuerzo permita incrementar el alcance de esta experiencia, de modo que crezca orgánicamente, y promueva una nueva forma de abordar los conflictos, contribuyendo a la convivencia pacífica, constructiva y equitativa en nuestro país.